Adoptada

Chantal, junto con Lorca y Marçal es uno de los bebés que junto con su madre Seda fueron recogidos de la Colonia Ruiseñor. La mami Seda por su alto grado de sociabilidad y los peques porque al ser bebés están en periodo de sociabilización, lo que es en definitiva una buena práctica de una correcta aplicación del método CER.
La pequeña Chantal, es una preciosa hembra de color blanco con unas graciosas manchas en la frente negras como el rabo, tenía como el resto de sus hermanos infección en los ojos, una de esas enfermedades que tanto afectan a los bebés y que en un hogar con tratamiento se cura rápido pero que, en la dureza de la calle, en muchos casos provoca la perdida ocular y en demasiadas ocasiones también supone también la perdida de la vida al carecer del sentido de la vista.
Nos decía su casa de acogida que llegó muy delgadita y pequeña, pero con una inmensas ganas de jugar y de enfrentarse a la vida a saltos, carreras y escaladas, era la más inquieta y la más trastito.
Su adoptante, el mismo que ha adoptado a Seda, nos solicito su adopción incluso antes de saber como era. La implicación, empatía y compromiso de quien es ya su papi hizo que al conocer la existencia de ese amor que tiene Chantal por madre, Seda, saliese en redes, nos solicitase su adopción junto con uno de sus bebes… y el bebé escogido fue la preciosa Chantal.
Para su casa de acogida ese transito que supone el momento de salir de su casa para ir al hogar definitivo siempre es un sentimiento agridulce, una separación que significa el final de una etapa, pero también el comienzo de otra en una familia que los espera con impaciencia, con ilusión y sobre todo con responsabilidad e infinito amor.
Queremos agradecer a sus padrinos y madrinas que han contribuido con su aportación mensual a que tuvieran llenos sus cuencos de comida, a que pudiéramos atender los gastos veterinarios de vacunas, test de enfermedades, desparasitaciones, tratamiento para la infección de ojitos de los pequeños, a que pudiéramos comprarles juguetillos para estimular su desarrollo.
A los donantes que nos echaron una mano.
A los seguidores de nuestras redes que han compartido para difundir, que nos han apoyado con todo su cariño, como la familia enGatada que son.
En definitiva, a todos los que hoy celebráis con nosotras que hemos puesto el mejor broche a historias de gatos sociables o desamparados en la calle, el de proporcionarles una familia.
¡Si deseas que sigamos escribiendo finales felices, colabora con enGatadas!